«El cerebro por naturaleza es ocioso; sin embargo, podemos moldearlo mediante estímulos y ejercicios mentales», explicó Wilfredo Silva Figueroa, especialista en neuropsicología clínica, durante su ponencia en el I Seminario Internacional de Psicología, organizado por la Universidad Continental.

Silva expuso sobre el «Déficit neuropsicológico y la memoria de trabajo en universitarios», y señaló que existen factores que influyen en la retención de información a corto, mediano y largo plazo. «Todo depende de nuestra capacidad de percepción y atención. Para fortalecer estas habilidades es importante ejercitar el cerebro», indicó el experto.

Precisamente, Silva Figueroa recomienda la lectura a modo de «gimnasia» mental que ayuda a entrenar nuestra memoria a corto plazo, fortalecerla y consolidarla en memoria a largo plazo. «Otro estímulo indiscutible –en la etapa prenatal– es la música. Se han realizado estudios donde un grupo de mujeres embarazadas se expusieron a la música y, al nacer, los niños demostraron gran capacidad de retención y predisposición a la lectura», explicó.

El cerebro sigue siendo un misterio para los científicos. No obstante, se ha demostrado que los estímulos juegan un rol fundamental en el desarrollo de los distintos tipo de memoria (reflexiva, abstracta, mecánica, etc.). «Los estudiantes deben ejercitar su cerebro para mejorar los procesos de aprendizaje», recomendó Silva.