El 90% de plantas de tratamiento de aguas residuales no cuenta con autorización para el vertimiento o reúso
Plantas de tratamiento de aguas residuales de empresas prestadoras de servicios de saneamiento, requieren atención urgente pues son un factor crucial en la eficiencia de la política de recursos hídricos en el país.
De las 163 plantas de tratamiento de aguas residuales operativas a nivel nacional, el 90% no tiene autorización ni de vertimiento, ni reúso; advirtió Dirk Loose experto en temas de vertimientos y obras civiles representante de la Cooperación Alemana, quien estuvo presente en la Universidad Continental a propósito de la conferencia “Diagnóstico de las PTAR en el ámbito de las EPS”, organizada por la carrera de Ing. Civil.
El problema de la informalidad en las plantas de tratamiento en el sector de las empresas prestadoras de servicios de saneamiento tiene como consecuencia, la ausencia de un sistema de fiscalización o monitoreo en el cumplimiento de los límites máximos permisibles y los estándares de calidad de agua, señaló Loose, quien además afirmó que no hay políticas de reúso estrictas, es decir se reusa lo que se puede, ya sea para riego o en algunos casos para cultivos de tilapia pero aún en estos ámbitos hay demasiadas dificultades para cumplir con los estándares, afirmó.
Entre las principales deficiencias identificadas se encontraron la informalidad y los altos estándares de calidad de agua, así como la ausencia de lugares para disponer de lodos y residuos sólidos de las PTAR, del mismo modo la ausencia de políticas para la reutilización del lodo en el agro.
Respecto al diseño e infraestructura de las PTAR, estas presentan fallas de construcción, carecen de medidores de afluentes y efluentes, del mismo modo no hay la inversión adecuada en tecnología avanzada para laboratorios, almacenes talleres, etc. Los terrenos de las PTAR no se encuentran del todo saneados legalmente y no cuentan con seguridad pública, insuficiente personal de mantenimiento.
Urge una adecuación normativa coherente en el sistema de tratamiento de aguas residuales en la que participen de manera armoniosa los gobiernos locales, regionales, los organismos competentes de medio ambiente y las empresas prestadoras de servicios de saneamiento. Es necesario mejorar y adecuar las políticas de reúso, que beneficien a las comunidades ya sea social y económicamente y también contar con el compromiso del sector industrial para responder a las demandas de sostenibilidad y cumplimiento de responsabilidades con el medio ambiente, resalto el especialista.