Por: Lincol Delgado Perez
La adopción de prácticas de enseñanza de alto impacto (HIPs) ha demostrado mejorar significativamente los resultados de aprendizaje en estudiantes universitarios. Sin embargo, su implementación enfrenta diversos obstáculos que los docentes deben sortear. En base a las experiencias recogidas del artículo High-Impact Teaching Practices in Higher Education: Understanding Barriers, Concerns, and Obstacles to Their Adoption, exploramos estrategias prácticas para superar estas barreras y fomentar una cultura de enseñanza más efectiva.
Desafíos para los docentes, presentados como las barreras para implementar HIPs incluyen restricciones administrativas, limitaciones tecnológicas y financieras, así como la falta de tiempo y apoyo institucional. Estos obstáculos impiden que se adopten prácticas pedagógicas innovadoras que podrían transformar la experiencia de los estudiantes en el aula, los desafíos se intensificaron durante la pandemia de COVID-19, donde la enseñanza remota exacerbó la desconexión entre docentes y estudiantes. La falta de capacitación adecuada y la sobrecarga de trabajo también contribuyeron a que muchos docentes se sintieran incapaces de aplicar HIPs en entornos virtuales. (VanWyngaarden et al., 2024)
Para superar estos desafíos, se sugiere implementar un programa de formación continuo enfocado en HIPs, acompañado de un soporte institucional robusto, en 4 grandes espacios:
- 1.- Formación Personalizada:
- 2.- Acceso a Recursos:
- 3.- Comunidades de Práctica:
- 4.- Evaluación y Reconocimiento:
Crear un programa de formación que ofrezca talleres teórico-prácticos sobre HIPs, adaptado a las necesidades y niveles de experiencia de los docentes. Estos talleres deben incluir el uso de tecnologías educativas y técnicas de enseñanza activa que promuevan el pensamiento crítico y la participación estudiantil.
Proporcionar acceso equitativo a herramientas tecnológicas y apoyo necesario, asegurando que todos los docentes, tengan los recursos necesarios para implementar HIPs.
Fomentar redes de colaboración entre docentes para compartir experiencias y mejores prácticas. Estas comunidades pueden ayudar a los docentes a sentirse apoyados y motivados a adoptar HIPs.
Incluir la adopción de HIPs como un criterio clave en las evaluaciones docentes y procesos de promoción, ofreciendo incentivos tangibles para quienes innovan en su enseñanza.
Una implementación de prácticas de enseñanza de alto impacto requiere un esfuerzo conjunto entre docentes y la institución. Con una formación adecuada, acceso a recursos y acompañamiento, es posible transformar la educación universitaria para que los estudiantes adquieran las habilidades críticas necesarias para su futuro profesional.
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