Por: Angela M. Mendoza Castro ~
La educación para el emprendimiento con enfoque social, desarrolla en los estudiantes, capacidades personales como la autonomía y autorrealización, capacidades sociales como la responsabilidad social y ambiental y capacidades económicas como la implementación de un proyecto empresarial (Sáenz y López, 2015). También se fomenta la disposición personal a la proactividad, generación de ideas y colaboración para la solución de problemas y transformación de una realidad mediante el aprovechamiento de oportunidades. (Rodríguez, Ruiz y Agudelo, 2016).
Sostenida en el paradigma constructivista de Piaget y la teoría socio cultural de Vygotsky, el logro de competencias en emprendimiento con enfoque social, promueve que el estudiante deje el rol pasivo y sea capaz de analizar y reflexionar con distintas dimensiones de la realidad para comprender su complejidad y plantear alternativas de solución.
El logro de competencias en emprendimiento social, debe considerar las necesidades de un mundo que cambia de forma rápida y constante y además demanda de prácticas que se originen desde el aprendizaje basado en el pensamiento complejo según indica la teoría de Morín, donde el estudiante integra conocimientos, actitudes y habilidades en situaciones problemáticas para transferir lo aprendido a las nuevas situaciones, constituyéndose en valiosa preparación para los desempeños profesionales en escenarios complejos e inciertos (Velandía, 2019).
Emprendimiento social
Son diversas las definiciones sobre emprendimiento social, empero se entiende a éste como una organización de impacto positivo en la sociedad que tiene como misión la solución a un desafío social y ambiental que afecta a poblaciones vulnerables mediante la puesta en de estrategias empresariales (Ames y Grados, 2020). El Premio Nobel de la Paz 2006 Muhammad Yunus resalta que, para iniciar con un emprendimiento social debe identificarse una necesidad y conocer las capacidades, sueños y potencialidades de las personas a las que se pretende ayudar (Yunus, 2010).
Rol de docente la formación de competencias emprendedoras
El rol que desempeñan los docentes en la formación de competencias emprendedoras es fundamental, pues acompañan al estudiante en su vínculo con el conocimiento, promoviendo la creatividad, la comunicación efectiva, el trabajo en equipo, la retroalimentación positiva y el pensamiento crítico.
Este proceso formativo requiere de la aplicación de estrategias y recursos de la metodología ágil para suscitar la construcción colaborativa y significativa del conocimiento para la innovación social, algunos recomendados en educación universitaria son:
- Aprendizaje basado en retos
- Flipped learning
- Escape room
- Design Thinking
- Lean Startup
A continuación, algunas publicaciones relacionadas a estas estrategias: