Este texto se basa en el artículo publicado por García, Blanco & Hernández (2024) quienes presentan:
A la gamificación a través del uso de una sala de escape room como una alternativa a las estrategias tradicionales del aula. Estos métodos educativos novedosos hacen que los estudiantes se involucren activamente y participen en el proceso de aprendizaje (p.2).
El escape room se destaca como un juego educativo en el que los alumnos deben enfrentar una serie de desafíos y acertijos para “escapar” de una sala, que en este caso representa el salón de clases. Dado que los alumnos deben usar sus destrezas de pensar críticamente, resolver problemas y colaborar para lograr el objetivo final, este enfoque ofrece una experiencia de aprendizaje inmersiva y dinámica. La sala de escape educa de manera efectiva, al tiempo que fomenta la colaboración y el compromiso en el proceso de aprendizaje al involucrar a los estudiantes en una actividad lúdica y desafiante.