Por: Miguel Angel Córdova Solís – Director de Tecnologías Digitales para la Educación.
En este post explicamos detalladamente acerca de las credenciales digitales alternativas y cómo algunas tecnologías emergentes, como el Blockchain, hacen posible la emisión automática y verificación segura de los datos al momento de la emisión de una credencial. Además, describimos las principales características de esta tecnología y compartimos como caso de éxito, la aplicación realizada en el Programa de Formación Docente DocDigConti de la Universidad Continental.
Las credenciales digitales alternativas
La definición de términos que surgen con la aplicación de tecnologías y prácticas educativas emergentes como las “credenciales digitales alternativas” suponen un problema. Sin embargo, en este artículo, explicaremos de manera clara y precisa, desmembrando este termino en tres palabras claves: credencial, digital y alternativo.
Credencial
Hace referencia a la certificación de una competencia, capacidad, destreza o habilidad. Por ejemplo un curso de Office Word de 16 semanas o un taller de Combinación de Correspondencia en Office Word de 2 semanas. Esta credencial, puede tomar la forma de un diploma, constancia, certificado o insignia (Figura 1), la cual es emitida por un tercero, a menudo, una Institución educativa, o alguna empresa u organismo público o privado, al que denominaremos como “emisor”.
Figura 1. Ejemplo de un certificado (izquierda) y de una insignia (derecha).
La credencial se le otorga a una persona que aprueba el curso o taller. Puede ser un estudiante, un profesional o un ciudadano sin estudios superiores que desea adquirir una determinada competencia; lo denominaremos “receptor”. Las credenciales sólo se obtienen si el receptor ha cumplido con los criterios de evaluación de sus competencias, lo cual evidencia el logro de la misma.
Digital
En cuanto a lo digital, nos referimos a la tecnología que permite la presentación, organización y almacenamiento de las credenciales, de allí la denominación de certificados digitales o badges digitales.
Los certificados digitales existen desde hace muchos años, prácticamente con el nacimiento de la Web y la posibilidad de generar documentos digitales en PDF. ¿Alguna vez recibiste un certificado en formato PDF por haber participado en un evento? ¿Alguna vez has escaneado una constancia y la enviaste por correo electrónico?, es probable que la respuesta sea afirmativa. Sin embargo, para evitar todo el proceso previo de escanear y enviar manualmente un certificado, el aporte de una tecnología emergente como el Blockchain es de gran ayuda, ya que hace posible que cualquier persona pueda visualizar y verificar que dicha credencial ha sido realmente emitida por el emisor.
El Blockchain (cadena de bloques) genera copias exactas y confiables en millones de computadoras de una transacción o documento y no en un único servidor centralizado. Esto quiere decir, que no depende de un único organismo o servidor que valide y verifique su emisión.
Por ejemplo, al aprobar un curso virtual ofrecido por tu universidad y al obtener el certificado digital, lo puedes compartir en tus redes sociales como por ejemplo Linkedin, para que así, cualquier persona o empleador potencial pueda, con un simple clic, verificar el certificado, evitando así procedimientos muy ambiguos y complejos como el consultar a la universidad la veracidad y legalidad del documento emitido.
Alternativa
Se refiere a que estas credenciales no necesariamente son emitidas por instituciones educativas, sino también por empresas, como Google, Microsoft o IBM (que desde años anteriores ya ofrecen cursos) o por diversos organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o colegios profesionales.
Esta práctica educativa emergente, la cual nació con los cursos MOOC (Cursos Online Abiertos y Masivos) y plataformas digitales de formación como Crehana, BID o Platzi, permite que cualquier persona, estudiante o profesional, pueda elegir libremente desarrollar competencias o habilidades según las necesidades de formación que requiera. Todo esto sin depender de una malla de estudios estructurada y cubierta por la educación formal. Es importante mencionar, que en la actualidad, algunas universidades ya vienen convalidando créditos de estudios de estos cursos obtenidos en estas plataformas educativas.
Características y beneficios del Blockchain en la educación
El Blockchain es una tecnología que tiene las siguientes características respecto a otras tecnologías tradicionales de seguridad:
Descentralizada
Cada operación o documento digital genera miles de copias encriptadas de manera descentralizada, esto elimina la práctica de tener un servidor o autoridad centralizada.
Transparencia y origen
Los usuarios pueden llevar el seguimiento de las transacciones.
Confianza
Al ser descentralizada y al generar miles de copias brinda a las personas confianza en las operaciones como pagos o certificados; de hecho, una aplicación de esta tecnología en las finanzas, son las criptomonedas como el famoso Bitcoins.
Sin mediadores
No es necesario un mediador, una tercera persona o entidad, las transacciones pueden ser realizadas entre los mismos usuarios. Esto puede ser una ventaja o no, en el caso de las criptomonedas se les cuestiona la falta de un ente regulador.
Inmutable
Al estar encriptados los registros se escriben y almacenan de forma permanente sin modificaciones.
Estas características permiten avizorar otras oportunidades en el ámbito educativo como: la posibilidad del reconocimiento automático, la transferencia de créditos, usarlo como pasaporte de aprendizaje permanente, rastreo de la propiedad intelectual y recompensar el uso y la reutilización de esa propiedad, entre otros beneficios.
Caso de éxito
En la Universidad Continental se ha implementado la tecnología de Blockchain en el Programa de Formación Docente en Competencias Digitales (DocDigConti), el cual ha permitido que 531 docentes de la institución compartan sus logros con cada curso aprobado en nuestra aula virtual. Mediante las credenciales digitales, de este programa, los docentes han recibido sus certificados de forma segura, verificados y validados automáticamente por la universidad (Figura 2).
Figura 2. Ejemplo de verificación de certificación digital emitida por la Universidad Continental.