Publicación: 11/12/2025
La enseñanza universitaria se caracteriza por la administración de un gran volumen de conocimiento, necesidades de pensamiento crítico, para generar recursos y materiales siendo muchas veces insuficientes prepararlos para un entorno de aprendizaje visual, donde integrados con los elementos visuales, multimedia e interactividad, se convierten en una alternativa prometedora.
El estudio de AlTameemi & Al‑Tamimi (2025), examina como un VLE (visual learning environments), es clave en el desarrollo del pensamiento analítico, ofreciendo evidencia sobre sus beneficios pedagógicos.
Ventajas identificadas
El uso de un entorno de aprendizaje visual presenta varias ventajas, como:
- Mejora del pensamiento analítico, tras implementar un VLE, los estudiantes obtuvieron puntuaciones superiores frente a los estudiantes de un grupo control. Ello indica que las presentaciones visuales, diagramas, mapas mentales, infografías entre otros, facilitan las actividades cognitivas.
- Atención y retención, los autores señalan que los materiales visuales dentro de un espacio VLE, generan mayor atención en el estudiante, contribuyendo a una mejor asimilación y retención.
- Flexibilidad y accesibilidad, que permiten al estudiante revisión e interacción, logrando que el entorno se adapte a distintos estilos de aprendizaje.
- Mejora de la creatividad y pensamiento crítico, donde los elementos visuales, promueven una construcción activa del conocimiento, los estudiantes no solo reciben información sino que interactúan, analizan y reconstruyen logrando una mayor autonomía.
Bajo las premisas de los resultados del estudio, se propone:
- Incorporar plataformas de aprendizaje visual, especialmente en asignaturas con alta carga teórica, usando esquemas, mapas conceptuales, infografías, videos, etc., como parte central de la estrategia didáctica.
- Incorporar en la formación docente el diseño y producción de recursos visuales interactivos para VLE.
- Evaluar a través de tareas que requieran análisis, síntesis y aplicación, basados en la riqueza del entorno.
El estudio AlTameemi & Al‑Tamimi (2025), aporta evidencia que los entornos de aprendizaje visual tiene mayor impacto en el desarrollo de habilidades cognitivas, elementales para la formación universitaria. Ofreciendo espacios interactivos de aprendizaje.




