¿Hay científicos en el Perú? Hay científicos peruanos pero la mayoría no está en nuestro país. Muchos, por su talento y olfato investigativo, trabajan en universidades y compañías extranjeras. Son captados desde muy jóvenes y solo regresan por visitas familiares o conferencias esporádicas.

Sin embargo, el Dr. Modesto Montoya decidió quedarse. Sin mucho esfuerzo podría asesorar alguna transnacional o dictar cátedra en una de las universidades más prestigiosas del orbe, pero ha preferido, desde la década de los 80, establecerse en el Perú para hacer lo que el resto no se anima: fomentar la ciencia y motivar la formación de investigadores en la tierra que lo vio nacer.   Modesto Montoya Zavaleta es físico nuclear, presidente de la Academia Nuclear del Perú, investigador sobre el proceso de fisión nuclear fría y el efecto de la emisión de neutrones sobre las mediciones de distribuciones de masa y energía cinética de los fragmentos de fisión. Es el principal promotor de la ciencia y la tecnología, fundador del Encuentro Científico Internacional que se desarrolla en Lima, Perú. Ha sido presidente de la Sociedad Peruana de Física y, entre 2001 y 2006, presidente del Instituto Peruano de Energía Nuclear.

Este científico de talla internacional llegará a Huancayo el próximo 3 de junio para dictar la conferencia magistral “Aplicaciones de la ciencia y tecnología nuclear para el desarrollo sostenible”, en la Universidad Continental. La cita es en el auditorio del campus a las 10:30 de la mañana. Además, Montoya recibirá la distinción doctor honoris causa por su trayectoria y contribución a las ciencias en el país.

Más datos. En 1975, fue becado por el gobierno francés y la Fundación Ford para estudiar en el Instituto de Física Nuclear de Orsay de la Universidad de París XI, donde obtuvo el Diploma de Estudios Especializados en física nuclear en 1976. Luego, gracias a una beca de la Dirección General de Investigación Científica y tecnológica, obtuvo el doctorado de tercer ciclo en física nuclear y física de partículas en 1977.

Recibió la beca de la Comisión de Energía Atómica de Francia, y con ello estudió en la Universidad de París-Sur, en donde realizó su trabajo sobre fisión fría con el que obtuvo el doctorado de Estado (doctorat d’Etat es-Sciences) en 1981, el máximo nivel académico en Francia.